En contra de la creencia popular, los corales no son vegetales sino animales, concretamente animales coloniales llamados zooides o pólipos. Las colonias pueden estar formadas cientos de miles de individuos y alcanzar tamaños descomunales.Los pólipos están emparentados con las medusas y las anémonas.
Los espectaculares colores que observamos son debidos a unas microalgas llamadas zooxantelas, que viven dentro del tejido del coral.
Los pólipos son carnívoros capaces de atrapar plancton por sí solos; sin embargo la mayoría de los corales obtienen la mayor parte de sus nutrientes de productos derivados de la fotosíntesis de las zooxantelas.
Los arrecifes de coral están en grave riesgo de desaparición, tanto por el calentamiento de las aguas como por acción directa del ser humano.
la teoría desafiada
Imagináos el siguiente diálogo:
A: Los humanos no descienden de los primates.
B: ¿Qué?
A: No descendemos de los primates, sino de otros animales desconocidos. Nos parecemos a los primates, pero nada más.
B: ¿Estás de broma?
A: Para nada. Hay una serie de estudios que están desafiando cada vez más la teoría de que somos primates.
B: Ya. ¿Y en qué universo paralelo se publican esos estudios?
A: Pues mira, por ejemplo tienes este trabajo (...) que salió publicado en la prestigiosa revista FNAS...
B: Sí, lo leí. No cuestiona para nada que los humanos desciendan de los primates.
A. Bueno, pero los autores piensan eso. Por lo menos uno. Bueno, o por lo menos un amigo suyo. Lo dijo en un periódico.
B: Pueden pensar lo que les salga del entoprocto; mientras no lo prueben en sus trabajos...
A: Pero es que hay muchas inconsistencias en la teoría de que venimos de los primates.
B. Huy, sí, muchas. ¿Por ejemplo?
A: Pues por ejemplo los fósiles de los chimpancés deberían ser más antiguos que los fósiles de los humanos.
B: ¿Por qué deberían?
A: Porque los chimpancés son, supuestamente, nuestros ancestros. Deberían aparecer antes en el registro fósil.
B: ¿Y quién "supone" que los chimpancés son antepasados del hombre?
A: Bueno, según la teoría de el-hombre-es-un-primate, los chimpancés son ancestros putativos.
B: Putativos... No, mira, verás: a los chimpancés se les considera parientes cercanos del hombre, no antepasados. Por cierto, los chimpancés y otros simios antropoides tienen muchísimos rasgos compartidos con los humanos. ¿Crees que es por casualidad?
A: Es que los simios antropoides tampoco vienen de los primates.
B: Aaaahhhhh. Ya veo. ¿Y de dónde vienen? ¿de los roedores?
A: De los humanos
Para una nación, como Gran Bretaña, llena de amantes de los animales, se estaba ante uno de los monstruos más fascinantes de la era moderna.
Al principio, cuando se creía que un ser despiadado andaba descuartizando gatos, la gente se apresuraba en denunciar los asesinatos. Y llegaron a reportarse 400 gatos muertos a lo largo y ancho de Londres. Expertos en bienestar animal y un grupo especial de la policía buscaban patrones de comportamiento que llevaran hasta el asesino serial.
Mientras tanto el número de víctimas crecía. El operativo para dar con el asesino cobró nombre:
"Operación Takahe", y los defensores de los animales llegaron a ofrecer una recompensa de 10 mil libras esterlinas por información que llevara al delincuente.
La falta de un culpable hizo que comenzaran a crecer todo tipo de especulaciones. Por ejemplo, que a los gatos se los mataba para rituales satánicos. Y luego lo peor: que el asesino podría volcarse a matar gente.
La policía británica investigó durante tres años la misteriosa muerte de unos 400 gatos en Londres, y acabó concluyendo que el culpable no es un macabro asesino en serie, o al menos no uno humano, sino depredadores, posiblemente zorros.
Los restos mutilados de cientos de gatos y otros pequeños animales, como conejos, fueron hallados en el barrio de Croydon y otras zonas cercanas del sur de la capital británica desde 2015.
Para entonces el asesino serial ya era el "Jack el destripador de los gatos".
Los vecinos horrorizados habían acusado a un misterioso personaje, al estilo Jack el Destripador. Fue apodado el "asesino de gatos de Croydon" y se creía que disfrutaba descuartizando a los animales y dejando sus restos cerca de las escuelas o las casas de sus amos.
Un refugio de mascotas llamado Snarl había llegado incluso a publicar el perfil del sospechoso: un hombre blanco de unos 40 años y 1,8 metros de altura.
Pero la policía de Londres aseguró que los culpables muy probablemente no eran humanos.
los expertos examinaron 25 gatos muertos y seis de las muertes fueron clasificadas como sospechosas. La policía dijo: "La causa de la muerte fue un trauma de fuerza contundente, como colisiones con vehículos. Se descubrió que las mutilaciones ocurrieron después de la muerte, y se pensó que algunas de ellas habían sido causadas por un instrumento afilado ".
La introducción del instrumento afilado levantó aún más los sospechas de que una persona estaba detrás de los hechos.
Fue a través de imágenes de cámaras de seguridad o CCTV.
Una mujer en el norte de Londres, después de encontrar el cuerpo mutilado de un gato en su jardín, revisó las cámaras de seguridad y vio a un zorro llevarse la cabeza del gato.
(Parece que se hubiesen también cruzado y hubiese salido otra especie gatuna)
"Tras un examen minucioso de las pruebas disponibles, los agentes, que trabajan con expertos, concluyeron que cientos de mutilaciones de gatos señaladas en Croydon u otros lugares no fueron la obra de un humano y son aparentemente el resultado de depredadores o carroñeros salvajes", afirmó la policía metropolitana.
Los investigadores explicaron así que el descubrimiento de una cabeza de gato en el zona de juegos de una escuela tenía una explicación totalmente inocente: "Las cámaras de seguridad mostraron que un zorro llevó la cabeza al parque infantil".
También se atribuyó a los zorros el caso de un gato sin cabeza ni cola que fue hallado por una mujer cerca de su casa y el de otro cuya cabeza apareció en el jardín de otra persona.
En junio de 2017, se encontró la cabeza de un gato en un patio de una escuela en Catford. Las cámaras mostraron a un zorro llevando la cabeza al patio de recreos. En julio de 2017, un testigo encontró el cuerpo de un gato sin cabeza ni cola junto a su propiedad. Sospechando que el gato había sido colocado allí, revisó las cámaras y vio a un zorro soltar al gato en la posición en la que luego lo encontró .
Y, como siempre, cada fascinante historia de crimen necesita un "cerebrito", un experto, que termina de cerrar el misterio. Y en este cuento fue Henny Martineau, el jefe de patología forense veterinaria en el Royal Veterinary College. En junio de 2018 examinó tres gatos y dos conejos y encontró en los cadáveres muestras de ADN de... ¡zorro!
La policía agregó que hace 20 años se dio una ola similar de mutilaciones de felinos en Reino Unido que fue atribuida a los zorros. Según la Universidad de Bristol, unos 33 mil zorros viven en zonas urbanas del país.
Desde entonces el dedo acusador señaló a un cruel asesino "el zorro".
Animales de todo el mundo salen de noche para evitar a los humanos
Cuánto miedo debemos de infundir y qué difíciles debemos de ponerles las cosas para que criaturas que se han comportado de la misma forma durante siglos adopten una nueva vida, marcadamente distinta a la que les distingue por naturaleza, tan solo para evitarnos. Un interesante estudio publicado en la revista «Science» concluye que los humanos están provocando que mamíferos de distintos lugares del mundo sean más activos de noche, cuando tienen menos posibilidades de encontrarse con alguno de los nuestros. Zorros, ciervos y jabalíes prefieren ahora salir en la oscuridad, pero esta estrategia puede causarles serios problemas en su fisiología y reproducción.
Los investigadores dirigidos por la Universidad de California en Berkeley realizaron un análisis a gran escala de 76 estudios sobre 62 especies de mamíferos en seis continentes, desde zarigüeyas a elefantes. En dichos estudios, se monitorizó la actividad animal usando herramientas como rastreadores GPS y cámaras activadas por movimiento. Los investigadores usaron los datos para comparar la actividad nocturna de cada especie durante temporadas de niveles altos y bajos de perturbación humana, lo que incluía distintas actividades, como la caza y el senderismo, o la agricultura y el desarrollo urbano.
Así, los autores descubrieron que, con la presencia humana, los animales preferían «hacer vida» de noche, alimentándose y cazando en la oscuridad. Por ejemplo, los mamíferos que solían dividir su actividad de manera uniforme entre el día y la noche, generalmente aumentaban su actividad nocturna al 68%. La respuesta fue más notable entre los grandes mamíferos que entre los pequeños.
Esto ocurría incluso si no había una amenaza manifiesta. Es decir, un ciervo podría volverse más nocturno simplemente porque ve a algunas personas haciendo senderismo en los alrededores, no porque corra despavorido delante de las armas de unos cazadores. El motivo, probablemente, es que nuestra mera presencia es identificada como una posibilidad de predación.
En apariencia, estos cambios de hábitos podrían tener efectos positivos, como ayudar a que humanos y animales coexistan. Sin embargo, la historia no es tan sencilla. Vivir de noche también podría suponer importantes pérdidas para estos seres, por ejemplo, en su reproducción.
Teniendo en cuenta que el 75% de la superficie terrestre está actualmente modificado por la actividad humana, para muchos animales no hay lugar donde esconderse, y solo les quedan las sombras de la noche. Para los científicos, las políticas de conservación también deberían tener sopesar estos factores, de la misma manera que se trabaja por respetar los espacios naturales.
Los humanos somos unos vecinos bastante insoportables para el resto de mamíferos. No es algo que nos tengan que recordar los animales. Somos insorportables para todo el mundo, incluso entre nosotros.
Cuando no los matamos por placer o nos los comemos, los molestamos con actividades incomprensibles para ellos como salir a correr o montar en bici. Así que muchos se están volviendo más nocturnos, para evitarnos. La Naturaleza es sabia, pero está por ver cómo afecta este cambio de hábitos a los animales.
Se ha comprobado que el coyote de California pasa más horas durmiendo de día para evitar a la gente que practica senderismo, paseos en bici y running.
En Nepal, los tigres que viven en las faldas del Himalaya duermen durante el día para transitar por la noche por las rutas que usan los turistas y los alpinistas.
En África, los elefantes que se alimentan del maíz que plantan los humanos han aprendido a evitar los sembrados durante el día, para acudir a comer por la noche.
Es un fenómeno global a nivel mundial, y no conocemos las consecuencias. Sabemos que en un humano cambiar sus hábitos de vida (por ejemplo trabajar de noche y dormir durante el día) afecta a su humor, estado de ánimo, e incluso puede provocar enfermedades. ¿Cómo afectará a los mamíferos que se están volviendo más nocturnos para evitar a los humanos? De momento, nadie lo sabe.
Hay fósiles que demuestran que los mamíferos eran animales nocturnos hace 65 millones de años, para evitar a los dinosaurios. Cuando se extinguieron, los mamíferos tardaron unos 200.000 años en volverse animales diurnos. 65 millones de años después, los humanos les estamos obligando a involucionar, para regresar de nuevo a sus hábitos nocturnos. Somos los nuevos dinosaurios de la era moderna. Agresivos e implacables con el resto de seres vivos, hasta el punto de que, en unos años, quizá sea casi imposible ver a un mamífero durante el día...
La contaminación acústica provocada por los barcos afecta la alimentación, comunicación y reproducción de diversas especies marinas del mar Mediterráneo
Una investigación llevada por el Centro Tecnológico Naval y del Mar de Murcia (CTN) en España, detectó las zonas del mar Mediterráneo donde hay más contaminación sonora. Y quizá pienses ¿y eso qué? Pues que está afectando el bienestar y la tranquilidad de los hábitats de especies como cachalotes, delfines y calderones, que habitan en las aguas del sur de Europa.
Pero ¿cómo contamina el ruido?
Aunque suene extraño, el exceso de decibelios contamina tanto el aire como el agua, de una forma distinta a como lo hacen los contaminantes gaseosos. Según Ortega, el tráfico marítimo propiciado por el ruido de los motores de los botes y barcos, representa el 30 por ciento de la contaminación sonora total en el Mediterráneo y el Mar Muerto.
Otra causa es el ruido provocado en los grandes puertos del sur como Marsella, Barcelona, Valencia, o Palermo; así como las instalaciones petrolíferas o de aerogeneradores.
¿Cómo afecta esto a la vida animal?
“La contaminación sonora bajo el mar afecta la comunicación, la reproducción y la alimentación de las 11 especies de cetáceos que viven en el Mediterráneo", dijo a El País la responsable del medio marítimo de la CTN, Marta Sánchez quien resaltó que el ruido antropogénico (efectos de la actividad humana) ha subido en los últimos años.
¿Cómo hacerle frente a esto?
Para combatir este problema ecológico, la CTN diseñó un programa llamado QuietMED, el cual pretende restringir legalmente a las autoridades de los múltiples puertos del Mediterráneo para atajar el problema de la contaminación sonora en todos los países que colindan con este mar.
Para que tenga mayor efectividad, el QuietMED se enfocará en distintos rubros:
principales especies afectadas, impacto ambiental por contaminación sonora, y crear un sistema de recopilación de datos para fines científicos. El siguiente paso es integrar a los países del norte de África y Medio Oriente.
Asimismo, el CTN inició un proyecto de conjunto para frenar la contaminación sonora. La primera fase consiste en crear un registro web que detecte las fuentes de ruido más fuertes en el Mediterráneo por medio de una tecnología de geolocalización satelital que será financiada por la Comisión Europea.
“El sonido bajo el agua tiene una velocidad de propagación superior que en el aire por lo que afecta la comunicación de los cetáceos del Mediterráneo”, dijo a El País la directoria del CTN, Noelia Ortega.
Antecedentes
Esta no es la primera vez que se toma una medida en Europa para controlar la contaminación sonora. En 2015, países del norte como Holanda, Bélgica, Reino Unido, Dinamarca, Alemania, Suecia y Noruega, pactaron estudiar el efecto de este fenómeno y así controlar el tráfico marítimo en sus países
.
Hoy se busca contrarrestar el ruido en el sur de Europa, principalmente en aguas italianas, francesas, y españolas, las cuales que son las más escandalosas del Mediterráneo.
La montaña más alta del mundo es también el basurero de mayor altitud del planeta, gracias a los turistas de "altura" que dejan a su paso una estela de desperdicios.
Desde que el explorador Sir Edmund Hillary alcanzó el pico del Everest de 8.848 metros -conocido como Chomolungma en el Tíbet y Sagarmatha en Nepal- en el año 1953, miles de personas que buscaban emociones fuertes han intentado su ascensión. Pero todo lo que sube no siempre vuelve a bajar y el Everest se está convirtiendo en un vertedero.
Sólo en el año 2017, alpinistas de Nepal recogieron casi 25 toneladas de basura y 15 toneladas de desechos humanos (equivalente a tres autobuses de dos pisos llenos), según un informe de Science Alert, que recoge la agencia AFP.
El problema no es como el de los cadáveres de los excursionistas muertos, que a menudo están en localizaciones demasiado precarias para ser recuperados de forma segura. La verdadera difiultad radica en los cientos de turistas que cada año montan sus campamentos en accesos relativamente fáciles y cuando se marchan dejan atrás tiendas de campaña, equipo de escalada rotos, bombonas de gas vacías y una gran cantidad de excrementos.
.La preocupación empieza a ser mayor y las autoridades locales buscan métodos eficaces para resolver el problema, que ya es "alarmante".
Pemba Dorje, el sherpa nepalés que ha coronado 18 veces el Everest explica a AFP que "es repugnante, una monstruosidad. La montaña acumula toneladas de desechos".
Tanto el Tíbet como Nepal han implementado sistemas para tratar de alentar a los escaladores a reducir sus desechos. El Tíbet sanciona a los alpinistas con 100 dólares por kilogramo que dejan atrás, y Nepal cobra un depósito de 4.000 dólares por expedición que se reembolsa si cada miembro baja al menos 8 kilogramos de basura.
En el lado de Nepal, el resultado de la campaña para mantener limpia la montaña fue que los escaladores devolvieron 25 toneladas de basura y 15 toneladas de excrementos, pero eso es solo una pequeña porción de la basura en la montaña; el problema es que muchos turistas ya están pagando hasta 100.000 dólares para poder subir al Everest y simplemente no les importa el depósito o la sanción.
Sólo la mitad de los alpinistas recupera las cantidades de residuos exigidas, según el Sagarmatha Pollution Control Committee (SPCC).
Según un informe de 2016, los sherpas locales eliminan 11.793 kg de heces humanas de la montaña cada temporada, arrojándolas en trincheras en un pueblo cercano. Esto se convierte en un pozo de podredumbre con el que los lugareños tienen que convivir y durante la temporada de los monzones, tiñe las aguas del río.
Los defensores del Medio Ambiente buscan soluciones a estos problemas y los ingenieros han propuesto convertir los pozos de desechos en una planta de biogás que transforme los residuos en combustible renovable. Mientras, los grupos locales están trabajando para limpiar la montaña.
La limpieza del Everest en China redujo 8,5 toneladas de residuos entre abril y junio de este año, y el Comité de Control de la Contaminación de Sagarmatha ha estado operando en el lado de Nepal desde 1991, implementando programas para mantener la montaña limpia.
Lo mejor sería que los excursionistas asumieran de forma individual la parte que les toca cada vez que tratan de ascender la montaña. Mientras no sea así, el Everest seguirá siendo el basurero de mayor altitud del planeta.
Matanza o sacrificio de animales sin aturdimiento previo.
Excepciones a la legislación europea sobre bienestar animal
1. Introducción
La legislación de la Unión Europea determina que todos los animales que sean sacrificados para consumo humano deben ser previamente aturdidos, es decir, deben estar inconscientes en el momento que se les provoque la muerte, a fin de evitarles sufrimiento. Sin embargo, existen excepciones legales a esta normativa, respaldadas por tradiciones culturales o ritos religiosos de distintos colectivos de población.
En el presente informe reflejamos cuáles son esas excepciones, especialmente crueles, que suponen un enorme padecimiento para los animales. También explicamos que los productos obtenidos de algunos de esos sacrificios pasan a la cadena de consumo sin ser debidamente etiquetados, por lo que los ciudadanos carecen de la libre elección de rechazarlos por motivos éticos.
Desde AVATMA respaldamos la postura de la Federación Europea de Veterinarios
(FVE) y consideramos del todo inaceptable la existencia de estas excepciones. El bienestar y la protección de los animales deberían estar siempre por encima decualquier consideración de carácter cultural, artístico o económico, y las tradiciones
religiosas deben conciliarse con el bienestar animal de manera que los animales no sufran.
2. La normativa comunitaria y sus excepciones
El Consejo de las Comunidades Europeas inició su actividad legislativa sobre el bienestar animal el 18 de noviembre de 1974 con la aprobación de lo que se considera la primera legislación al respecto, la Directiva 74/577/CEE del Consejo de 18 de noviembre de 1974, relativa al aturdimiento de los animales antes del sacrificio:
.
El hecho de que la primera legislación comunitaria aprobada lo fuera sobre ese momento de la vida (y de la muerte) del animal, es coherente con la situación en otros ámbitos geográficos. En efecto, los resultados del cuestionario realizado en 2008 por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) sobre el estatus de la legislación sobre protección animal y su implementación muestran que éste es el asunto relativo a la protección de los animales de granja regulado por más países (el 91%) (1).
El debate político y social en Europa en lo relativo al tratamiento de los animales en el momento del sacrificio había sido considerable ya en el siglo XIX en Alemania, pero no fue hasta la entrada de Reino Unido, Irlanda y Dinamarca en la CEE cuando se llegó al acuerdo de elaborar una legislación comunitaria sobre la protección de los animales. Fue así como la Comisión presentó su propuesta sobre el aturdimiento en marzo de 1974, en cuyo preámbulo se refleja la importancia fundamental de legislar en esta materia, evitando la disparidad de legislaciones nacionales que pudieran afectar al funcionamiento del mercado común. De esta forma, se dictó que la Comunidad debía emprender acciones a fin de evitar toda forma de crueldad hacía los animales, considerando oportuno que, en una primera fase, esta acción tendiera a prevenir la crueldad hacia ellos en el momento del sacrificio, mediante la generalización de prácticas que consisten en dejar inconscientes a los animales por medios apropiados, antes de ser matados. Aun así se reconoció la posibilidad de otorgar ciertas derogaciones en determinados casos, en relación fundamentalmente con ritos religiosos, sacrificio de emergencia o sacrificio del ganadero para autoconsumo.
La definición final de “aturdimiento”, que desde la primera reunión (en octubre de 1973) había sido objeto de debate, fue la siguiente: “se entenderá por aturdido todo procedimiento en el que intervenga un instrumento mecánico, la electricidad o la anestesia con gas, sin repercusiones sobre la salubridad de la carne y de los despojos, y que aplicado a un animal lo sumerja en un estado de inconsciencia que persista hasta el sacrificio, evitando en todo caso sufrimientos inútiles en los animales“.
En 2009 se adoptó el Reglamento (CE) nº 1099/2009 del Consejo de 24 de septiembre, relativo a la protección de los animales en el momento de la matanza, que, desde el 1 de enero de 2013, es la normativa vigente en la materia
.
3. El sacrificio de animales de acuerdo con ciertos ritos religiosos
matanza rito religioso
Desde hace unos años se ha dejado sentir en los países de nuestro entorno cultural una intensa atención en lo referente al sacrificio de animales para el consumo humano. Preocupa, de una parte, la salud, pero se tiene muy presente también el objetivo de atajar la crueldad y de evitar sufrimientos a los animales que se van a matar. Estas exigencias se han traducido en regulaciones minuciosas, con amplia presencia del Derecho Comunitario, que predeterminan rigurosamente toda forma de actuar. Y es aquí donde hace su aparición un primer conflicto: el sacrificio ritual que realizan algunas religiones como la judía, la musulmana o la sij exige que los animales, en el momento de su sacrificio, estén en perfecto estado de salud. Según ese principio, un animal aturdido podría ser considerado “enfermo” en base a algunas interpretaciones de la norma, y ello tiene como consecuencia que se eluda el aturdimiento previo del animal que van a sacrificar.
El método de sacrificio general utilizado en matadero es por degüello, cortando los vasos sanguíneos de ambas partes del cuello (arterias carótidas y venas yugulares) con un único corte sin dañar la espina dorsal. Además, se cortan también tráquea, esófago y paquete nervioso.
El sacrificio debe completarse en menos de 30 segundos después del inicio de la inmovilización y dentro de los 10 segundos posteriores a la sujeción de la cabeza del animal. Al seccionar los vasos principales, la consciencia se pierde de forma gradual, pero durante este proceso el animal puede sentir ansiedad, dolor y estrés. Si el corte se realiza de forma eficaz, el animal comenzará a perder la consciencia entre los 10-15 segundos siguientes, pero la ausencia de signos de vida debe seguir comprobándose hasta 30-40 segundos después en ovino y caprino y 2-2,5 minutos después en el caso de los bovinos
. Si el corte no se realiza adecuadamente y solo se seccionan las venas yugulares, el tiempo en perder la consciencia puede alargarse hasta casi 5 minutos . Si no se seccionan las dos carótidas a la vez habrá oclusión de las arterias seccionadas (aneurisma) y dolor durante y después del corte. El aneurisma de la arteria carótida en los bordes de corte es un proceso bastante común en bovino; la oclusión ocurre a los pocos segundos de la incisión y retrasa la instauración de la inconsciencia, por lo que es necesario realizar siempre una supervisión continua y sistemática de todos los animales sacrificados sin aturdimiento .
Como hemos visto, ya en la primera legislación sobre sacrificio de animales (Directiva 74/577/CEE del Consejo) se incluyó la excepción para ritos religiosos, la cual se ha mantenido hasta nuestros días:
En noviembre de 1991 la Comisión presentó su propuesta de reglamento relativo a la protección de los animales en el momento de su sacrificio o matanza. La Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo propuso que la carne de los animales sacrificados sin aturdimiento se vendiera etiquetada, y hacía mención al sacrificio por ritos religiosos, pero la Comisión la eliminó de sus anexos. Finalmente, en 1993 se aprobó la Directiva 93/119/CE del Consejo de 22 de diciembre, estableciéndose su transposición por los Estados Miembros antes del 1 de enero de 1995
En 2008 la Comisión presentó una propuesta de legislación que venía a sustituir la Directiva del 93. El Comité Económico y Social emitió su dictamen en que criticaba algunos aspectos del texto, como el que se permitiera la derogación para ritos religiosos. Tras la consulta al Parlamento Europeo, el Consejo, en septiembre de 2009, adoptó el reglamento relativo a la protección de los animales en el momento de la matanza, el Reglamento (CE) nº 1099/2009 del Consejo de 24 de septiembre, normativa vigente en la materia desde enero de 2013 . En el Artículo 3 de dicho reglamento puede leerse: “1. durante la matanza o las operaciones conexas a ella no se causará a los animales ningún dolor, angustia o sufrimiento evitable. 4. En el caso de animales que sean objeto de métodos particulares de sacrificio prescritos por ritos religiosos, no serán de aplicación los requisitos del apartado 1, a condición de que el sacrificio se lleve a cabo en un matadero”.
Esta última premisa entra en conflicto con ciertas festividades tradicionales como la fiesta del cordero musulmana o Eid al Adha, que se celebra en varias localidades de nuestro país y en las que se siguen sacrificando a los animales sin aturdimiento previo y fuera del matadero (en la vía pública o en recintos privados).
En cuanto a comercialización de la carne proveniente de animales no aturdidos, sin que ello sea conocido por el consumidor, aunque durante las negociaciones que dieron lugar al Reglamento (CE) nº 1099/2009 del Consejo de 24 de septiembre surgió de nuevo esta cuestión, no fue hasta la aprobación del Reglamento (UE) nº 1169/2011 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 25 de octubre de 2011, sobre la información alimentaria facilitada al consumidor, cuando la Comisión mencionó la necesidad de abordar este asunto de forma particular. Así, en su considerando 50, puede leerse: “Los consumidores de la UE se interesan cada vez más en la aplicación de la reglamentación de la Unión sobre el bienestar de los animales cuando se los sacrifica, incluido el aturdimiento previo al sacrificio. A este respecto, debería examinarse la posibilidad de facilitar a los consumidores la información relevante sobre el aturdimiento de los animales en el contexto de una futura estrategia de la UE para la protección y el bienestar de los animales” . Más adelante, la Comisión Europea, en el marco de la estrategia de la UE para la protección y el bienestar de los animales 2012-2015, incluyó entre sus medidas la realización de un “Estudio sobre la posibilidad de ofrecer a los consumidores información adecuada sobre el aturdimiento de los animales”.
El informe de las conclusiones de dicho estudio, publicado en 2015, indica que este etiquetado conllevaría “un alto riesgo de estigmatización de las comunidades religiosas, especialmente en el contexto político actual”, por lo que parece poco probable que la Comisión Europea presente una propuesta de legislación que obligue al etiquetado de la carne en la que se especifique si el animal del que proviene ha sido o no aturdido .
Es evidente que la utilización política de este asunto en el pasado y el debate social en algunos países, que ha llegado al Tribunal Europeo de Derechos Humanos , dificultan la posibilidad de efectuar cambios.
Hay que apuntar que lo relativo al consumo de carne por parte de una religión distinta de la que profesan los que la han producido no es una cuestión novedosa, pues lleva siglos formando parte del debate social. Ya se planteó en la legislación de 1394 sobre las carnicerías en Toulouse, o en 1415, sobre el mismo sector de actividad en Barcelona, por lo que no deja de sorprender que más de 500 años después este asunto siga siendo de actualidad
Lo que sí resulta cuanto menos cuestionable es que los ciudadanos europeos nos veamos obligados a comer productos animales que desde determinadas posiciones morales no deberíamos vernos obligados a consumir, por desconocimiento al no tener información oficial de cómo fueron sacrificados dichos animales.
Por otra parte, es un hecho que diferentes corrientes de pensamiento dentro de los grupos religiosos indican que no hay prescripciones específicas en los textos sagrados concernientes a la prohibición del aturdimiento previo al sacrificio, y consideran que el animal aturdido es perfectamente aceptable pues la condición de que el animal no puede morir antes del sangrado o sacrificio se cumple.
Un grupo de reflexión de la Universidad del Cairo compuesto por representantes de las cuatro corrientes reconocidas (Shafii, Hanafi, Maliki y Hanbali) concluyó por unanimidad que no había ninguna objeción religiosa al aturdido y, por ejemplo, la Liga Musulmana Mundial, que cuenta con teólogos, científicos y líderes en todo el mundo, ha hecho saber desde 1986 que el aturdido del animal por electronarcosis previo al sacrificio no produce ningún problema ni objeción de tipo religioso. Cabe resaltar que incluso los animales aturdidos con pistola de bala cautiva podrían incluirse en este grupo, ya que este dispositivo no produce la muerte del animal, pues su corazón sigue latiendo y el sangrado se produce perfectamente, como se comprueba en todas las canales y carnes procedentes de animales aturdidos mediante este sistema. Es decir, según expertos estudiosos de temas religiosos, cualquier procedimiento que sirva para aturdir al animal evitándole sufrimientos inútiles, y con la condición de que se consume su muerte en el momento del sacrificio, es permitido, aunque al animal le quedara vida pero no la suficiente si se le dejara (por ejemplo, un animal aturdido con bala cautiva u otro método del que no se recuperara con suficiente vida si se le dejara después).
Aunque de momento prevalece la costumbre de no aceptar el aturdido previo, aludiendo –injustificadamente- que el animal se sangra mejor sin él y que la muerte se produce casi de manera inmediata, su aceptación en estas matanzas rituales supone una mejoría en cuestiones de bienestar, al evitarse el sacrificio con plena consciencia y sensibilidad por parte del animal y su inmovilización en cajones de sujeción que les producen un gran estrés, sobre todo si son invertidos.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) también refleja, en sus directrices para el sacrificio del ganado , que el animal debe estar insensibilizado por un tiempo suficiente para que el sangrado posterior ocasione una muerte rápida por pérdida de oxígeno en el cerebro; en otras palabras, que la muerte debe producirse antes de que el animal recobre el conocimiento. Esto resulta de interés, ya que la condición de los sacrificios religiosos de que el animal no puede morir antes del sangrado se cumple.
En cuanto al posicionamiento científico emitido en 2002 por el más importante cuerpo profesional europeo que trabaja por la salud y el bienestar animal, la Federación de Veterinarios Europeos (FVE), ésta opina que, por respeto a los animales como seres sensibles, las prácticas de sacrificio sin aturdimiento previo son inaceptables en cualquier circunstancia por las siguientes razones:
Si no hay aturdimiento previo aumenta el tiempo hasta la pérdida de conciencia, a veces, varios minutos. Durante este periodo los animales estarán expuestos a dolor y sufrimiento innecesarios por diferentes motivos: superficie expuesta de la herida, aspiración de sangre y, en el caso de rumiantes, del contenido ruminal y la posible asfixia después de cortar el nervio frénico y el nervio vago.
La matanza sin aturdimiento previo requiere, en la mayoría de los casos, una restricción de movimientos añadida que causará un estrés emocional adicional en un animal que ya está previamente asustado.
La FVE añade que, mientras se permita cualquier derogación al respecto, solo se sacrificarán animales sin aturdimiento previo en mataderos con licencia para ello y en presencia de un veterinario que podrá parar la cadena de sacrificio cuando lo considere oportuno. Los bovinos no deberán ser invertidos y, si se ha de llevar a cabo el sacrificio sin aturdimiento previo, los animales serán aturdidos inmediatamente después de haberse realizado el corte, que deberá afectar a los carótidas y a las dos yugulares, ya que los cortes repetidos aumentan el potencial de infligir dolor, sufrimiento y angustia. Además, solo se permitirá este método de sacrificio para aquellos animales que vayan a ser consumidos por los ciudadanos de comunidades que comulgan con dicho método.
Los ganaderos que los criaron tienen derecho a conocer el modo en que sus animales van a ser sacrificados y las canales y todos los productos de su despiece obtenidos de esta manera deberán ser debidamente etiquetados indicando si el animal ha sido previamente aturdido. Esta normativa de etiquetado establecida para Europa debe cumplirse también para productos importados de terceros países no comunitarios
Es preciso señalar que a Organización Colegial Española, miembro de la FVE, no ha publicado aún este posicionamiento en su sitio web en castellano.
Hay que destacar que si bien la Unión Europea sigue autorizando esta excepción legal, varios países europeos ya han hecho efectiva la prohibición de sacrificar animales para consumo humano sin aturdimiento previo: Suecia, Noruega, Austria, Estonia, Suiza, Lituania, Islandia y Dinamarca (9, 10, 11, 12). Además, en Holanda hubo un intento de prohibir estas prácticas en 2011 mediante un proyecto de ley presentado por el Partido de Los Animales que fue ratificado en el Congreso, pero el acuerdo fue sometido a negociación posterior y, tras la votación del Senado, volvieron a permitirse un año después (12, 12). En Reino Unido, la British Veterinary Association (BVA) instó al Gobierno en 2015 a poner fin a los sacrificios sin aturdimiento previo, sin excepciones, basándose en la evidencia de que este tipo de prácticas permiten a los animales sentir dolor y comprometen el bienestar animal .
Esta evidencia científica incluye el Proyecto DIALREL (15) financiado por la UE que duró cuatro años (2006-2010), y que concluyó que “se puede afirmar con una alta probabilidad que los animales sienten dolor durante y después del corte de garganta sin aturdimiento previo”. Se trata de una posición apoyada por la Humane Slaughter Association, el Farm Animal Welfare Council y la Federación de Veterinarios de Europa, y que fue respaldada por más de 100.000 firmas de ciudadanos británicos (14). En Valonia, la región más grande de las tres que componen Bélgica, se acaba de hacer efectiva la ley que prohibirá el sacrificio de animales sin aturdimiento previo a partir del 1 de septiembre de 2019.
Sin embargo, en otros países como España, los procedimientos de sacrificio sin aturdido previo contemplados como excepciones por la normativa vigente (Ley 32/2007 de 7 de noviembre, Real Decreto 37/2014 de 24 de enero) se están convirtiendo en una regla generalizada, debido a los intereses industriales y comerciales del sector cárnico.
Esta singularidad prevista para unas minorías religiosas se ha transformado en un abuso cada vez más aplicado en los mataderos que los consumidores desconocen, dado que la legislación no obliga a las carnicerías a informar del modo de sacrificio. En este sentido, una noticia publicada en 2013 (17) indicaba que el 12% de los bovinos y ovinos (55.000 animales en total) sacrificados al año en Mercazaragoza se mataron por el rito islámico, habiéndose multiplicado por 15 este tipo de sacrificio en los últimos 3 años en dicho matadero. Actualmente, casi la mitad de la ternera y el cordero en Cataluña han sido sacrificados por este mismo rito (18). Una de las razones para el aumento de esta práctica en la especie bovina es que por costumbre y por poder adquisitivo, ya que la clientela musulmana suele comprar partes del ternero que no utilizan los demás clientes, como las patas delanteras y otros cortes de baja calidad. Estas piezas a veces se quedan sin vender cuando las reses se matan por el sistema convencional, así que, para aprovechar al máximo el animal, se mata al modo islámico y esas partes se colocan en comercios de clientela musulmana, mientras que el resto, las partes nobles y los cuartos traseros, se venden en las carnicerías convencionales